Para el 35º Congreso de la Iglesia Protestante Alemana 2015, celebrado en Stuttgart, los estudiantes, bajo la dirección del profesor Andreas Löffler, realizaron la Villa Stroh, un edificio en el que se cuentan cuentos a los niños. El lugar elegido fue el Stadtgarten, justo al lado de la entrada principal de la Universidad de Ciencias Aplicadas de Stuttgart. Se trataba de un edificio temporal construido íntegramente con materiales naturales, principalmente balas de paja comprimida. Todos los materiales se reciclaron y la construcción se reutilizó en otros lugares. El edificio gustó tanto a los visitantes del congreso eclesiástico como a los habitantes de la ciudad que no se desmontó a los cinco días, sino que permaneció en pie durante tres meses enteros. Sólo se desmanteló porque nadie quería responsabilizarse de su uso permanente. La fase de prueba previa a la construcción demostró también que es posible construir edificios de balas de paja comprimidas de hasta dos plantas.